Este proyecto nace como respuesta a la coyuntura dada por el covid-19 en 2020. Partiendo de la etimología de la palabra desastre que viene de mal astro o desconexión de los astros, interpreto el panorama actual como una irrupción por parte de nosostres a los tiempos que viven las especies y el universo que habitamos. Con la intención de retomar este tiempo, busco crear un dispositivo que nos permita imaginar nuevos mundos y formas de relacionarnos desde el cuidado y los afectos.
Este proyecto fue desarrollado en el marco del laboratorio de creación Confinamiento Hacker #enunfuturonomuylejano de Plataforma Bogotá y se guardó una copia para la cápsula del tiempo guardada allí que se abrirá en 2030.
Impreso en Taller Colmillo en diciembre de 2020 en risografía a dos tintas, en papel eggshell de 270 gramos y plastificado.
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